Entre la calefación... las copas... el waterpolo... y los besos y sobeteos de Pablo... el ambiente se conviertio en un Rojo apasionado...era todo como muy cariñoso, muchos besos, fotos indecorosas, amigos varios, recuerdos del verano...
Y como una triste cenicienta o un ilusionado Pinocho... el reloj marcó las tres y un Pepito grillo llamado Mario dijo... ¡¡SE ACABÓ!! para casa... y asi fue para casita, un cd de musiquita de la nuestra y una copa en el sofá hablando de todo lo que nos queremos y que tus primos, para mi, sin como si fueran mis primos, y que tu madre me ha dado un cariño que no me lo ha dado nadie, y que tu hermano se ha criado conmigo, y que vasos mas bonitos y comprados con tanto amor... ¿ el orden? ni idea pero el estado, sin dudarlo era la fase de amor ilimitado que da el alcohol... ¿ que le vamos hacer? somos unos engañados!!!
P.D. el concierto de "Se dan clases de Zambomba" al que ibamos a ir todos el sábado... Pili y Patri duraron 10 minutos. El resto, sin noticias...