Un viernes de primavera, cualquiera, en este caso 27 de Marzo... viaje a Sevilla, una cita, varias quedadas, amigos, gente, coche y atascos. La llegada un poco movidita debido al trafico de la capital Hispalense... "siempre así" nos amenizó el viaje y alguna que otra llamada telefónica a Silvia y Clara, que ambas en sus trabajos, aburridas o preocupadas, necesitaban consejos y charlas terapeúticas para no morirse de la envidia o de los nervios... Aparcamos, caminamos, caminamos, hasta el Oasis en el desierto, La Plaza del Divino Salvador, un montadito de chorizo y otro de Pringá en "Los Soportales", y mucho vinito blanco semi dulce del condado de Huelva... las horas, la tarde pasaba, las citas iban atrasandose y el vino entrando en nuestro cuerpo... ¡¡ Mas montaditos!!
Mis citas llegaron a media tarde, la hora, esa fue la hora, la Plaza paso del almuerzo a ver niños jugar, capirotes recien pegados, naranjos cuajados de azahar, la iglesia abierta, los turistas viendo el Señor de Pasión y nosotros en busca del Amor de Sevilla en Primavera... Las chicas de Geografía fueron uniendose y animandose al vernos nuestro ritmo. Lipassan y su brigada de limpieza nos "expulso" de la Plaza, ¿ donde vamos a las 6 de la tarde y un poco contento?, la voz de la sabiduria popular, Loli, dijo: - Vamos a "Bestiario" que hay la misma gente a las 5 de la tarde que a las 5 de la mañana.
Pues a "Bestiario" que nos fuimos, la llegada fue triunfal, como si entraramos en Jerusalem, una plataforma, dos escalones y la pista de baile llena de gente, risas, fotos, copas, charlas, corbatas, tacones, deportes... copas a 5,80€... una tarde mágica, Llego Rafa, Manuel y se fue Macarena... todos por las calles de Sevilla, me dejan una Bici por la estrecha calle Zaragoza, Patri me tararea "Vacaciones de Verano" y en una curvita caida y eje trasero de la bici al carajo... Otra noche mágica en una maravillosa Ciudad.
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